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2385. Miércoles, 12 febrero, 2014

 
Capítulo Dosmilésimo tricentésimo octogésimo quinto: "Incluso la gente que afirma que no podemos hacer nada para cambiar nuestro destino, mira antes de cruzar la calle”. (Stephen Hawking, 1942, físico británico).

Esta mañana me levanté un poco más temprano que de costumbre. Con un poco tiempo de más pensé que podía, administrando ese tiempo extra, tomarme las cosas con más calma, gastar esos quince minutos en tomar el café más relajado, estar más tiempo en la ducha y que el agua caliente circule sin tener que mirar continuamente el reloj. No sé muy bien cómo pasó, pero media hora después de haber puesto el pie en el mundo todavía seguía pensando en qué haría con el tiempo extra. ¿Cómo fue que perdí la ventaja? Ah, pues sí: dejándome llevar por la indecisión.

Finalmente no pasó nada grave y el café circuló por mis venas antes de salir al trabajo eso sí, sin parar de pensar en la cantidad de tiempo importante y, principalmente, de los buenos momentos que nos perdemos por ser víctimas de la indecisión.