Capítulo Dosmilésimo cuadringentésimo decimocuarto: "La verdad es una ortiga; el que la roza apenas, se pincha; al que la coge con fuerza y resolución no le hace nada." (Moritz Gottlieb, 1795 -1858; escritor húngaro).
Empezando el martes con algo fuerte, fuerte, muy fuerte. Con, ni más ni menos, que una espectacular instantánea captada por fuentes muy fiables (de las que, por razones obvias, no se pueden dar más datos) en las que se aprecia cómo, al atardecer, unos submarinos atómicos abarrotados de armas nucleares compiten en una sorprendente y peligrosa carrera. Un documento único sobre el que, a buen seguro, habrá un antes y un después.
Y sí, ya sé, se ve lo que se ve, pero no es un fraude, la credibilidad de las noticias que siempre han aparecido en este blog no dejan duda alguna. Pero es que… ¡son submarinos atómicos! Y si se viera más podría desaparecer esta página en menos que canta un gallo... y encima alegando un accidente.
