-   


  

2543. Jueves, 6 noviembre, 2014

 
Capítulo Dosmilésimo quingentésimo cuadragésimo tercero: “No esperes hasta que las condiciones sean perfectas para comenzar algo. Empezar hace perfectas las condiciones”. (Alan Phillip Cohen, 1954; escritor estadounidense)

En California hay un banco de leche materna para adultos, leche que sirve como terapia auxiliar en los enfermos de algunos tipos de cáncer. Hasta ahí bien, pero que:

- En Hong Kong la leche materna sea una delicatesen que se vende envasada o directamente desde el pecho y alcanza precios muy altos.
- Una madre china ponga a la venta (en Taobao) barras de jabón hechas con su propia leche materna.
- En una heladería londinense, Ocecreamist, de Coven Garden, vendan helado preparado con leche materna donada acompañada de galletas y una especie de paracetamol.
- El chef Daniel Angerer, de Nueva York, convierta la leche de su esposa en queso para consumo en su restaurante.

Me parece a mí un poco exagerado. Y mira que uno tiene pocos reparos en llevarse de todo a la boca, pero hasta los más lardosos (oseasé, gorrinos totales) tenemos unos límites.