Capítulo Dosmilésimo quingentésimo nonagésimo tercero: “En realidad no me importa si la gente quiere poner su dinero en remedios médicos fraudulentos; lo veo como una especie de impuesto voluntario a la ignorancia científica”. (Ben Goldacre, 1974, médico británico.)
Chica que no es que esté buena sino que casi da asco de lo buena que está y que tiene un novio, un completo gañan, del que está completamente loquita pero que no le hace el más mínimo caso. Entonces aparece un chico sensible y romántico (que no es que tenga
mariconerismo, no, es que es romántico y punto) que la trata como una reina. La chica se acaba enamorando de él. Pero ella, echando de menos al tío chulo (las mujeres son raras), vuelve con el gañan dejando al sensiblón hundido en la miseria.
Pero como las
pelis duran hora y media y todavía les queda un buen rato que rellenar, la tía, dando un giro dramático a los acontecimientos (y que son bastante caprichosas ellas ¡que leches!) se da cuenta de que el chico gañan solo la utiliza para desarrollar sus complejos y que al que quiere de verdad al sensiblón por lo que va en su busca. Mientras, el romántico, que justo en ese momento hundido en la miseria y el dolor está a punto de coger un avión para irse a la otra punta de los
eeuu (estas cosas siempre pasan en los
eeuu) pasea meditabundo por el aeropuerto. Y es en ese momento cuando ella irrumpe en el aeropuerto, se salta todos los controles de seguridad bajo la tierna mirada de los otros pasajeros y de todas las azafatas, (que para eso allí tienen mucho más en consideración al amor y su inconmensurable poder) y le dice que se ha dado cuenta de que es el hombre de su vida. Él (que aparte de sensiblero es un
calzonazos) la perdona y ambos se funden en un largo y apasionado beso.
Hay quienes las llaman
pelis románticas, otros
pelis de amor, algún insensibles les dice
pastelacos del 15, pero su nombre correcto es
comedias románticas. Ya que, aparte de no haber por dónde cogerlas, son tan absurdas que acabas partiéndote el culo con ellas. Y si sale la
jenniferaniston ni te cuento… Claro que, ¿hay alguna en la que no salga?