Capítulo cuatromilésimo centésimo trigésimo quinto: “Aburrirse en el momento adecuado es signo de inteligencia”. (Clifton Fadiman, 1904 – 1999; escritor estadounidense)”.
Por fin un helado rico, sano y 100% natural. Sin azúcar, sin huevo, sin lactosa, sin alcohol, sin gluten, sin saborizantes, sin conservantes sin colorantes; apto para vegetarianos, para veganos, para musulmanes, para judíos, para católicos y para cualquier otra religión a las que tanto les gusta joder a sus parroquianos prohibiendo comidas.
Que tal y como se está poniendo esto de las cosas de comer no estaría de más aprovechar esa gilipollez !peeeerdón… quería decir ten-den-cia! moderna de comer lo más sano y natural posible sin tener que renunciar a unos buenos helados este verano, (lo de que estén ricos ya si eso lo vamos viendo).
Por cierto, el cucurucho no se come, solo funciona como el elemento decorativo que todo diseño pismoderno necesita para poder ser caro.